Contenido 4 filosofía: Karl Marx, el hombre alienado

 Contenido 4: 

Karl Marx, el hombre alienado

 

Para el filósofo alemán Karl Marx (1818 – 1883) el ser humano es decir el sujeto real y concreto, es un ser perfectible, un ser que progresa y se perfecciona, la imaginación y la creatividad del hombre son capacidades infinitas para Marx.

Sin embargo, cuando Marx escribe su obra, la segunda mitad del siglo XIX se consolida el capitalismo en gran parte de los países europeos fundamentalmente Inglaterra y Francia en donde tiene lugar el desarrollo de la fábrica, como centro de la vida económica y productiva de las sociedades.

Los obreros que en ella venden su fuerza de trabajo a cambio de un salario mínimo y de subsistencia trabajan gran parte de las horas del día encerrados y privados de toda legislación laboral que ampare sus derechos.

Para Marx lo que distingue al ser humano de los animales es la actividad del TRABAJO, el hecho y la capacidad de usar la razón y la imaginación para tomar un objeto de la naturaleza y convertirlo en algo nuevo, es decir en transformarlo, crear algo, ejemplo del árbol tomado de la naturaleza se crea la mesa, el trabajo es la actividad mediante la cual el ser humano pone en juego su imaginación y transforma la naturaleza.

Pero durante el capitalismo y la producción fabril el ser humano en su función de obrero no produce algo nuevo, sino que su producción es en serie y no produce todo el objeto, sino que solo un componente, por ejemplo, en una fábrica automotriz un obrero no hace el auto completo, solo una parte de todo el producto. Por tal motivo se ve obligado a repetir durante horas y horas de la mayor parte de su vida el mismo movimiento rutinario y mecanizado, en este sentido el hombre se confunde con la máquina y de a poco empieza a convertirse también en el en una maquina productiva, se ha convertido en algo útil y dócil.

Según Marx el ser humano en el sistema capitalista se encuentra alienado, es decir separado, privado de, ¿Pero de que ha sido separado? De sus facultades más humanas, de su imaginación y de su voluntad.

La sociedad industrial capitalista que Marx analiza, es un mundo de mercancía, en donde todo tiene un precio y en donde alguien debe producir esos objetos, el obrero que produce esas mercancías, produce algo que no es suyo, esas mercancías pertenecen a los capitalistas, los dueños de las fábricas, las mercancías son el símbolo de su explotación, y le resultan inalcanzable porque su salario es solo para subsistir , comprar alimentos  que le permitan tener la energía necesaria para el otro día presentarse a trabajar.

Según esta descripción para Marx se da la siguiente situación, en consecuencia, el obrero no se afirma en su trabajo, sino que se niega, no se siente cómodo, sino que desventurado, no despliega su libre capacidad creadora sino por el contrario martiriza su cuerpo y su espíritu. El obrero solo tiene la sensación de estar consigo mismo cuando esta fuera del trabajo y cuando está en el trabajo se siente fuera de sí, la paradoja que señala Marx es que cuando el obrero está en el trabajo se siente un animal cuando en realidad hace lo que le es propio al humano trabajar, y cuando el obrero está en su casa hace se siente humano llevando a cabo las actividades propias de los animales, comer, dormir y procrear. El capitalismo y el trabajo de la fábrica altera la naturaleza humana trastoca el sentido de la existencia. Por el modo de vida que el obrero lleva no puede ver su condición de explotado, no puede tomar conciencia que sufre la explotación por parte de los empresarios, que extraen ganancias a costa del trabajo físico de ellos.

ACTIVIDADES:

1)      Buscar información sobre el Manifiesto Comunista.

2)      Buscar cuales eran las condiciones laborales en la época que escribe Marx

3)      Lee el texto y responde; ¿Por qué Marx señala que el hombre es un ser alienado?

4)      ¿Por qué el trabajo de la fábrica hace del hombre un animal?